Hoy como la ruta no era demasiado larga di alguna concesión más a la almohada y sobre las las 9:30 salía de Villatoro.
De nuevo el wikiloc, un trozo de aquí y otro de allí hizo posible esta ruta.
Salida de Villatoro por una zona de pista ancha que después se mete en un robledal bastante frondoso, una subida suave que tiene algunos tramos mas pendientes.
El camino va a dar al alto de Villatoro, junto a la carretera, para después de abrir una puerta girar de nuevo a la izquierda y seguir subiendo, por pinar, con otro tramo bastante suave, que pasa por el nacimiento del Adaja en lo que se llama "Las Fuentes del Adaja".
Aquí habia bastantes puesto de caza, me imagino que será paso de muchas aves y de ahí los puestos.
Una vez hecha la visita y la foto en esta sitio obligado, que estudiamos en la antigua EGB, retorno al camino y continúo ya lo que me queda de ascenso, ya casi terminado para girar a la derecha (dirección Oeste) y comenzar un largo descenso entre un frondoso pinar y después robledal.
El descenso es rápido, pero como siempre en estos caso me lo tomo con cautela, a pesar de que el camino sea ancho, ya quecon la sombra no se ven muy bien los baches y piedras.
Después de este descenso, giro a la izquierda para abandonar el camino ancho y pasar a sendero con algunas zonas bastante empinadas alternadas con otras menos y algun paso de los de hacer equilibrio
Tras este tramo llegamos al "Molino del tio Alberto" por el que dí una vuelta para recrearme, lamentablemente no tiré foto...
Abandono el molino y salgo a la carretera de Villafranca a Navacepedilla de Corneja, la misma que días antes hice con la bici de carretera en mi ascenso a Chia, por lo tanto reciente conocida, y parte de sus toboganes también.
Una vez en el pueblo, paso por sus bonitas calles perfectamente empedradas (merece la pena meterse por el pueblo) y a la salida, dirección Garganta de los Hornos, hago el único repostaje de agua del día y aprovecho para comer algo.
Tan solo relleno el bidón, pues he ido provisto con el deposito de la mochila lleno por si las moscas.
Hacia Garganta de los Hornos, también carretera, entro por el pueblo donde veo otra fuente y lo abandono pasando por delante de su Ermita y comienza de nuevo la pista ancha y en buen estado.
Empieza a ponerse cuesta arriba, pero es a partir de una portera cuando la cosa se pone fea de duro. Rampas del 18% con mucha arena suelta me dificultan el avance y con mi piñon de 32 atrás hoy me toca meter riñón.
Parece que en una zona suaviza y aprovecho para comer un trozo de barrita que dejé a medias antes en la fuente , pero creo que fue mal momento, pues después de pasar por un arroyo vino una rampa tremenda en la que no podía ni masticar, ni tragar, con lo cual la verdad casi me ahogo, pero a pesar de todo conseguí acabar la rampa montado y tragarme la barrita al final jeje.
Continúan las subidas hasta un prado con una bifurcación que tomaré a la derecha y en la que después de un tramo favorable pasare una puerta oxidada con cerrojo, donde empezará lo malo del día.
Un camino ancho que se hace cada vez más roto y pendiente. Piedras sueltas, lanchas de piedras, piornos que se meten en la trazada, agujeros y demás dificultades del terreno me hacen emplearme a fondo con mi 32, y mis riñones. Es el único tramo de la jornada que me ha dado calor.
Aquí me cruzo con dos bikers que vi al principio de la jornada cerca de Villatoro, que debieron hacer la ruta al revés que yo, y que me dieron una envidia horrible, ver como bajaban por las piedras y como iba yo. Intercambiamos unas palabras sobre la marcha, mientras me ceden la trazada buena y mas limpia en la subida.
Desde aquí se alcanza a ver la Sierra de Gredos.
Sigo mi calvario por las piedras hasta llegar a un zona en la que hay desvío al otro lado de la alambrada que he llevado paralela en mi subida, pero yo continuo por el camino hasta ningún sitio, por un tramo igual que por el que venia que bien me podía haber ahorrado, pues subí baje por el mismo sitio en un tramo que no aporta nada y si pierdes bastante tiempo, pues me tuve que bajar unos 50 mts (menos mal que como siempre en rutas desconocidas....calzado de pateo).
El camino acaba en un prado y un alambrada, típico de las zonas de montaña. Un camino que usarán para echar de comer al ganado sin salida al final de él.
Lo dicho, bajo por donde he subido hasta la bifurcación y me las apaño como puedo para saltar la alambrada, pues tenia pinta de estar recién tensada, yo repte y salté mochila y bici por encima...un número vamos...
desde donde se puede tomar alguna buena panorámica (con una cámara claro, con el móvil salio esto...)
Después el descenso siempre ancho y en muy buen estado llega a unas zetas muy duras, en las que me acordé de los otros pobres, y como las debieron de pasar por ahí (allí estaban su rodadas), luego el camino se mete en un pinar donde me salió al paso un cervatillo, venado o como se llame ó lo que sea, la caza no es lo mio jeje.
Al final dura ruta de unos 40Kms, que me gustó bastante sobre todo hasta el Molino, y en menor medida las subida llena de piedras, pero bueno hay que hacer de todo.
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