
Fuimos poco numerosos pero bastante ruidosos a base de silbato y trompetas artesanales que parecia el sonido de un elefante, y adermas se cortó el acceso a la Plaza, montando un pitote de tráfico bastante serio, teniendo que retroceder los coches por la Calle de San Segundo.
Siguen con sus reivindicaciones y desde aquí les deseamos toda la surte que sea posible, y que si no se soluciona el conflicto consigan arañar el máximo de indemnización posible.
¡¡¡¡ ANIMO !!!!
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