A pesar de que el sábado el día estaba un poco feo y la previsión meteorológica era poco prometedora, en un salgo no salgo, al final salida, Opa no tiene grupo hoy y decido bajar con él al punto de encuentro, donde entre miembros de un grupo y otro conseguimos sacar un grupo de 6.
Chispea un poco, peor no hace demasiado frío, así que camino de la antena y los pastos de invierno.
No hemos salido de la zona del botellón en la antigua fábrica de harinas y rotura de cadena de Opa. El par que transmite es elevadísimo y la cadena dice basta. Menos mal que con un experto mecánico en el grupo la reparación no lleva ni cinco minutos.
Solventado el percance comenzamos la ruta ya en serio.
En el Colegio Santa Teresa de Martiherrero la lluvia se hace más fuerte y tememos durante un rato por del desarrollo de la ruta. Arroyo quiere cambiar de destino, porque según él por donde íbamos era peor, pero al final seguimos el plan establecido y nos dirigimos al Pozo, a ver si el Jabalí de los Avila Bici, que formaba parte del grupo se cae al rio.
Allí como buen Ávila Bici, pasa el charco montado y ni las zarzas de la salida del agua que le agarran de su maltrecha indumentaria son capaces de frenarlo. Se lleva el aplauso y continuamos la ruta.
En este tramo hasta la carretera, uno de los componentes de la expedición comienza a perder contacto y a sufrir. Monta poco y el viento de cara y el chubasquero a modo de parecidas que viste no ayuda, con lo que al final le convencemos para que se lo quite y continúe sin el, pues la lluvia, ya parecía cesar.
Mientras llegamos a Casasola por Hernan Gallego, Arroyo nos deleita con una de sus historias, y más en concreto la victoria de etapa de la vuelta a España del ’81 con ese tono humorístico que le caracteriza.
Arribamos al pueblo, comemos un platanito, tiramos la foto del día y realizamos la vuelta, entre charlas y de manera más cómoda ya con el viento de espaldas, por Duruelo, y el pinar, para ir a dar a la Colilla y de nuevo por la antena a casa.
Un recorrido de poco mas de 30kms que nos sirvió para quitar el gusanillo, y para poder agarrar el típico resfriado de esta época.
Entradas
